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Lo primero, gracias por visitar este blog, en él escrinbo mi libro, espero que si lo lees disfrutes mientras lo lees y que te hagas seguidor y espero que te guste. Gracias.

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miércoles, 28 de diciembre de 2011

Capítulo 10 + Felicitación + Amapola

Hola a todo el mundo, espero que estéis pasando unas buenísimas naviades :) Aquí os dejo el último capítulo que publicaré en este año que está a punto de acabar, espero que os guste aunque es un pelín cortito ¿vale?







Capítulo 10
Sacando conclusiones.








-Primero:



Los síntomas de la trasformación son horrorosos, sé que anteriormente hice la estúpida pregunta- ¿eso es todo?- pero lo siento, me arrepiento de haber formulado tal pregunta, lo pienso detenidamente y es horroroso. Lo he pasado fatal hoy en el instituto y mi intuición me dice, que no tengo mucha, pero que creo que esta vez llevo la razón lo de hoy no ha sido el final, acaba de comenzar y me da a mí que este dolor que he pasado durante estos días lo sufriré más. Me duelen todavía un poco las rodillas aunque he salido del instituto y me encontraba mejor pero ahora estoy tumbada en el sofá del salón de mi casa y no me puedo mover, no es que me pase lo que me ha pasado en el instituto pero… es por el gran cansancio que siento en el cuerpo.

Hoy mi padre no vuelve hasta la noche y mi madre vendrá dentro de una hora y media con mi hermano ya que trabaja en el mismo colegio que va mi hermano, estaré sola durante ese tiempo, me parece incluso un alivio, no quiero que me vean así.
Ahora es la hora de comer, yo acabo de terminar de comer pero cuando venga mi madre ella comerá y aprovecharé a ir a mi cuarto a echarme un rato en la cama, pero no me apetece ahora.

Aprovecho ahora que estoy sola, en silencio y sin agobios a reflexionar y lo primero que me viene a la cabeza es que, no debería de haber sido tan borde y dura con Jason, yo en realidad no soy así pero no sé por qué me muestro así con él, si ni le conozco. Decidido, mañana cuando vaya a clase le pediré disculpas y espero que me perdone aunque supongo que sí.

Además, ya que hoy no me han mandado deberes aprovecharé a ir a casa de Ione para hablar con ella sobre todo esto, la tengo que informar ya que ella es la experta desde hace años y también le pediré unas cuantas explicaciones, que las necesito a la de ya.




-Segundo:



Ya llega la época de exámenes, estaré muy atareada estudiando y haciendo deberes, no sé qué haré y encima me viene esto tan extraño que estoy viviendo ahora mismo, voy a estar muy agobiada y eso es decir poco.

Espero que el destino, la vida o lo que sea que tenga que ser sea bueno y considerado conmigo para aunque sea sacar bien los exámenes y luego lo que pase que tenga que pasar por la ley de la naturaleza, que pase.





Tercero:



Ese chico, el chico nuevo que ha venido hoy a mi clase, Jason, no sé por qué pero no me inspira confianza alguna- con mucha gente que he conocido me ha pasado esto de que no me inspire confianza pero él es distinto- y además de que tampoco sé por qué veo algo raro en él si tiene que ser un chico normal ¿no? Me surgen demasiadas dudas y sólo es el primer día que le veo, ya veré los próximos días que quebrantaderos de cabeza, que me conozco.

Me he quedado de piedra cuando hoy en el pasillo a solas me ha dicho en esa última conversación “y en realidad, sí que es asunto mío, siempre lo fue”, no lo entiendo, si no sabía a lo que yo me refería y supongo que no sabe lo que estoy viviendo ahora mismo. ¿A qué se refería con que en realidad sí que es asunto suyo? Y lo más sorprendente, que me ha llamado la atención y lo que me ha asustado fue “siempre lo fue”, solo puedo decir una cosa ¿QUÉ?

No es asunto suyo y punto.

Otra cosa que no sé, ¿Por qué le doy tantas vueltas de esta manera todo lo que he pasado en el día de hoy con este chico, ese idiota, extraño, chulo, pero que se preocupa por mí…? -Suspiro-
¿¡Eh!? ¿En qué estoy pensando?





Por último:



Definitivamente, he sacado una conclusión para todo esto en lo que he reflexionado: todo esto me supera y por eso me está afectando tanto a la cabeza e incluso puedo concluir con que mi salud mental es dudosa, pero es que estoy demasiado confusa con todo, demasiadas cosas en sólo dos días, dos estresantes días.











Espero que os haya gustado :)



Feliz Año!!

Espero que os lo paséis realmente bien el día de Nochevieja, que tengáis una buena noche y que tengáis una buena entrada al año nuevo al que dicen tanto del fin de mundo xD  2012
Gracias a todos los que os unís a este blog, ya somos 37, somos pocos pero me basta para saber que hay una poquita gente en la tierra que les gusta mi libro :)



Amapola.

Sí, así se llama un blog nuevo de una amiga mía llamada Sandra, su blog es bonito y original, espero que os paséis (clica aquí) y así descubriréis de que va a ir, es nueva por lo tanto desea que la gente se pase. Espero que aunque sea lo visitéis pero yo is aseguro que no tiene pérdida! Espero que os guste tanto como sea posible.












Gracias por leer.

domingo, 18 de diciembre de 2011

Capítulo 9

¡Hola! Bueno ya aquí tengo el capítulo nueve, y además, muchas gracias por comentar y visitar mi blog y me alegro un montón de que un grupito (aunque sea pequeño) le guste mi libro... un gran abrazo para mis seguidores/as.








Capítulo 9
Verdaderamente raro.





-¿Pero Naya, que te ha pasado?- me pregunta mi profesor después de que el otro profesor me siente en la silla.
Se repite esta misma pregunta tantas veces como tantos alumnos hay en esta clase. La verdad, con tanta pregunta y tanto grito me empiezo a sentir nerviosa, disgustada y sobre todo muy agobiada. Respiro  muy deprisa, me escuecen los ojos, los latidos de mi corazón se aceleran y miro a cada compañero de mi clase rápidamente y en todos los rostros, absolutamente todos tienen o cara de sorpresa o de miedo, el único que no expresa nada y que está serio mientras me mira es Jason, que chico más raro.
“Es demasiado extraño, me da incluso miedo de que me mire con esa cara, seriedad total y tiene las cejas demasiado unidas” tal pensamiento me ronda en la cabeza en una milésima de segundo, es que es verdad, da demasiado miedo con esa siniestra expresión.
Se me olvida todo porque de repente siento que se me vuelven a dormir desgraciadamente las piernas, esta vez estoy menos asustada y tengo claro que delante de todos no voy a llorar, soy una chica fuerte. Ahora el grito del profesor me saca de todo pensamiento.
-¡Silencio!- dice mi profesor elevando mucho la voz y como no, todos se callan al instante, típica escena en la que todos se callan y debería sonar un grillo pero aquí no hay grillo que valga, silencio absoluto- ahora mismo voy a ir a secretaría para que alguien llame a una ambulancia, mientras no quiero oír ni un solo ruido mientras me ausento. A quien pille hablando cuando venga sufrirá las consecuencias- y tras decir esto mi profesor se va rápidamente de la clase y ha dicho esto porque como nos quedamos solos ya que el profesor de Dafne también se ha tenido que ir porque su clase tampoco se puede quedar sola.
Ante la vista atenta de todos los compañeros de la clase se acerca a mí Dafne y pone una de sus manos en mi hombro apoyada.
-Naya, ¿qué te ha pasado?- me susurra al oído para que nadie oiga la conversación que quiere comenzar.
-Dafne, no es el momento más indicado como para hablar de esto ¿no?- le informo mientras todas las miradas están dirigidas a nosotras, me intimidan demasiado… me siento demasiado observada y miro al suelo avergonzada.
-Me da igual, dímelo- esta vez noto seriedad en su voz.
-No sentía las piernas, me sentía impotente y no he tenido más remedio que avisar- le respondo con la voz ligeramente temblorosa nada más empezar a recordarlo.
-¿Crees que será de… eso?- me pregunta en un tono bajo.
-¿De eso, qué?- le pregunto extrañada.
-Que cortita estás ahora mismo- comenta negando con la cabeza Dafne y veo que está un poco decepcionada por mi mente que estos momentos está tan bloqueada como mis piernas.
-Bueno, bueno… ¡Ah! Ya sé a lo que te refieres… tal vez- le respondo lo que quiere al fin.
-Por fin, Naya, me estabas preocupando- comenta enseñando su sonrisa.
Después de esto intento mover las piernas y al fin consigo moverlas, aunque con dificultad pero lo consigo. Corriendo tengo que avisar al profesor para que no llame a una ambulancia ¿pero cómo?
-¡Dafne!- la llamo ya que ahora se encuentra en el pasillo para esperar al profesor y la clase entera se estremece ante la elevación de la voz que de repente he hecho, todos son muy cotillas, intentando averiguar qué pasa, incluso algunos de la clase me han preguntado y yo por supuesto he dicho que nada malo pero en el fondo todo el mundo sabe que no es así- hazme el favor de avisar al profesor de que no llame ya a una ambulancia que ya estoy bien, mira- le digo para que vea ella como muevo por fin las piernas.
-Sí- exclama mientras sale corriendo por los pasillos y se oye el eco de sus pisadas fuertes, seguras y rápidas.
No había pensado en eso antes pero ahora de nuevo siento miles de miradas que me agujerean en especial la de Jason, que sigue tan siniestra como antes.
A los pocos minutos entran por la puerta de la clase mi profesor y Dafne.
-¿Ya estás bien? Estaba casi cogiendo ya el teléfono para llamar a la ambulancia ¿quieres ir a llamar a tu casa para que te vengan a recoger?- me pregunta mi profesor aún preocupado y rápido, tanto que le he conseguido entender con un poco de dificultad.
-No gracias, estoy bien, no necesito nada- le digo mientras me levanto, aunque me siento un poco mareada le quito importancia, coloco la silla del profesor en su sitio y me voy a sentar en el mío.
-Dafne, vete ya a tu clase- le ordena el profesor a mi mejor amiga que ésta asiente y muestra de nuevo una sonrisa, el profesor se la devuelve pero con un sentido diferente “vete ya por favor” y cierra la puerta después de ver que ya sale.
-¿Segura que estás bien? ¿No quieres nada?- me pregunta de nuevo, creo haberle dicho anteriormente que sí estoy bien.
-Sí, ya estoy bien- digo ante toda la clase y en alto como el profesor.
-¿Segura?- ya hemos pasado por esto dos veces ¿no?
-Sí- afirmo definitivamente con un tono ya molesto que el profesor por fin percibe y empieza de nuevo a dar la clase aunque ya solamente quedan diez minutos de ella.

Cuando al fin llega la última hora me siento mucho mejor y aliviada porque solo el dolor durara más o menos un cuarto de hora ¿eso es todo? , vale, lo he pasado mal en su momento pero por las palabras de ayer de Ione me parecía mucho peor y catastrófico.
Cuando suena el timbre que anuncia que el lunes en el instituto ya ha acabado intento recoger rápido para que Dafne no tengo que esperar mucho fuera ya que tiene gimnasia y sale la primera, cuando voy a salir por la puerta alguien me agarra el brazo, una mano un tanto grande y con verdadera fuerza pero no la suficiente como para hacerme daño. Al menos no me duele en comparación con lo que he pasado hoy.
-Si necesitas algo, me da igual lo que sea, que sepas que estaré ahí ¿vale?- me informa Jason  serio y luego esboza una sonrisa, una bella sonrisa.
-¿A qué viene esto? Pero si sólo nos conocemos de… ahora- le pregunto mirando mi brazo en el que me agarra y él rápidamente me suelta.
-Sólo para que lo sepas- sonríe- ¿qué te ha pasado?- me pregunta ahora mostrando interés aunque no sé si siente eso ya que exagera demasiado su fingida curiosidad, levanto una ceja más que la otra.
- Nada que… perdona, pero no es asunto tuyo- le digo de nuevo molesta, me irrita este chico aunque en el fondo sé que no debo ser tan borde con él pero es que me incita a serlo.
-¡Ja!- exclama él de repente, menos mal que ahora ya no hay nadie por los pasillos, somos los últimos en salir de allí, Dafne me va a matar- vale, sé que no sabes nada, pero que sepas que en realidad sí que es asunto mío, siempre lo fue- me dice mientras se da media vuelta, baja las escaleras y se marcha.
Todo tipo de cosas me rondan por la mente: ¿A qué ha venido eso? Que chico tan raro, ¿Qué no sé el qué? ¿Es asunto suyo? ¿De verdad? ¿Por qué me dará la sensación que debo de alejarme de él? Me da miedo pero a la vez…
Pero a lo que me tengo ahora que concentrar es en salir corriendo para que Dafne pueda “matarme” ya.
-¡Dafne!- grito en el patio para llamarla y hacerla saber de que no me he ido sin ella.
-¡Tú!- exclama mucho más fuerte que yo, menos mal que aquí también estamos solas- ¿qué pasa contigo? ¡Te mato ahora mismo por tardar tanto y mantenerme aquí en este sitio!- está enfadada pero a la vez sonríe por tal situación  tan cómica: corro con la mochila con dificultad ya que pesa mucho y ella pisándome los talones y levantando un puño al aire, también Dafne corre con dificultad y va cada vez más lento ya que no puede con las risas que se echa porque parecemos dos pingüinos corriendo.
Cuando ya nos rendimos y hay paz, nos reunimos y hablamos mientras nos dirigimos a nuestras casas. Hablamos del día lo interesante y lo que no, giramos a la derecha, luego a la izquierda y después vamos recto, ahora Dafne empieza y veo que se le forma una sonrisa en su rostro, pero picarona y eso me da un miedo terrible.
-¿Qué planeas?- le pregunto fingiendo miedo y apartándome poco a poco de ella.
Vamos por una calle estrecha y giramos a la derecha.
-No planeo nada, sólo pensaba- mantiene esa sonrisa siniestra y suelto una carcajada.
-¿El qué?- le pregunto sonriente aunque me da miedo saberlo.
-¿Quién era ese con el que hablabas en la puerta de tu clase?- me da unos codazos suaves, cuando ve mi cara de asombro sigue hablando- sí, me ha dicho Natalia que te retenía un chico nuevo de tu clase en la puerta ¿qué?- sonríe mucho más.
-Qué graciosa- hago una mueca y sigo- sí, uno nuevo que es bastante pesado- le digo solamente, poniendo mala cara e intentando que Dafne no me mire a los ojos, siempre me delato a mí misma.
-Es guapo y me da a mí que a ti también te lo parece aunque me jures por lo que sea que a ti te da igual- me da unas palmadas en la espalda, como me conoce la muy mala- ese pelo castaño, esos ojos verdes, esa musculatura, esa sonrisa-
-¿Y tú que sabes? si no le habías visto o al menos no te has fijado.
-Yo me fijo en todo y lo sabes tú mejor que nadie- una carcajada.
-Anda- le digo levantando la mano abierta y mirando al suelo- calla y anda- le digo riéndome por lo bajo y ella me ve y suelta ella también una carcajada sonora.








Espero que os haya gustado :)  Yo al imaginarme la escena última tan cómica se me escapa una pequeña carcajada... jajaja. Bueno por fin van a llegar las vacaciones de Navidad y queda solamente una semanita para Navidad y poquito para fin de año... a ver que tal se ve el año 2012 (tanta gente con lo del fin del mundo... es que...  -.-')  pero bueno, espero que sea un buen año para todo el mundo :)
Un gran saludo a la gente que lee mi libro y comenta aquí.













Gracias por leer.

jueves, 8 de diciembre de 2011

Capítulo 8 y algo más.

Hola a todos, sí, aquí hoy pongo el capítulo ocho. Sé que el anterior fue un poco cortito pero este capítulo es bastante más largo y encima pasa algo... si quieres saber lo que pasa ya sabes :) Sigue leyendo.





Capítulo 8
El comienzo.





Al unir su mesa a la mía yo me pego a la pared pero él vuelve a unir su mesa con la mía, no hay nada que hacer, no tengo escapatoria.

Cuando se sienta me mira, ve que no me apetece mucho entablar ahora una conversación con nadie y no quiero comenzar nada, aún así él habla.

-Hola- me saluda en un susurro casi inaudible incluso para mí que estoy a su lado, para que nadie, por supuesto, nos oiga- ¿Cómo te llamas?- no quiero ni mirarle para no quedarme mirando sus preciosos ojos y no quiero hablar con él, aunque me muera por preguntar si él fue el chico de ayer del parque.

A los pocos segundos me rindo y le miro directamente a los ojos, el mantiene perfectamente la mirada pero a mí me cuesta y la bajo, sonrojada, cojo un libro y lo comienzo a leer, le doy la agenda para que se distraiga un poco copiando el horario que tenemos.

-Me llamo Naya- le respondo- aquí tienes el horario- no le miro, solo me limito a leer falsamente.

Antes de que coja la agenda le miro de nuevo, él me mira y me fijo de que se está mordiendo el labio inferior, me da un vuelco al corazón, no sé por qué y vuelvo a la tierra.

-Gracias- me agradece, amablemente.

Me encojo de hombros mientras miro el paisaje por la ventana, viendo como varios pájaros vuelan, los coches pasan por la carretera, personas andando por la acera, municipales controlando el tráfico y por supuesto algún alumno que en este momento se salta la clase que le toca ahora, tiene que haber por ahí alguno a la fuerza.

Yo, personalmente como seguramente muchas personas cuando me miran fijamente y no miro a esa persona que me clava la mirada por la espalda noto su mirada en mí, como si me la clavara o me quemara por donde pasa su mirada, me pone los pelos de punta y precisamente ahora mismo tengo esa desagradable sensación. Jason me mira fijamente, de nuevo, sin apartar la mirada de mí ni un segundo, me sonríe por décima vez consecutiva, que agobio, aunque en el gran fondo me gusta… ¡¿Cómo puedo pensar en esa tontería?!

Ya le voy a escupir alguna frase un tanto desagradable como: ¿Tú que miras?” o “Cámbiate de sitio por dios que me pones de los nervios tú y tu mirada” pero suena la campana, de todas formas yo no soy tan grosera.

Riiiiiing.

Por primera vez por mi cabeza pasa este pensamiento: “Salvada por la campana”

Menos mal que Jason se limita a dejar la mesa a su lugar original, separada de la mía, silla y todas sus cosas pero casi no le dejan las chicas de mi clase que este año desgraciadamente me ha tocado en la misma clase de las tonta-populares, que desgracia la mía y ahora son problema de Jason ya que le están rodeando como abejas a una flor.

Yo ignoro a todas e intento escapar, con éxito, de este lugar del aula ya que no está la jefa de estudios que se ha ido corriendo y las populares están rodeando a Jason y son demasiadas. Me deslizo entre muchas mesas de la clase hasta que llego a la mesa de Natalia. Ella ya que pasa de todo y tiene un estilo un tanto extraño y oscuro nunca se molesta en ir a mi mesa y así hablamos, no, tengo que ir yo a la suya, pero creo que esta vez se lo agradezco ya que mi mesa está rodeada de chicas enloquecidas por el nuevo y que piden turno para hablar con él, en especial porque seguramente sea el nuevo juguete que maltratar durante un tiempo por cada una, un lío de un día y punto.

Ahora tengo una hora de estudio asique me toca quedarme en clase y estudiar.

-Hola de nuevo Natalia- la saludo felizmente y con un tono cantarín aunque realmente feliz no estoy, me siento… extraña, mi cuerpo está extraño.

-Hola de nuevo Naya- me saluda Natalia imitando mi voz- ¿Qué tal con el nuevo?- suelta una risita- perdón- y suelta otra- es que… que pringada- ahora ya suelta la carcajada que quería soltar desde hace un buen rato, que chistosa ¿verdad?
-Ja, ja, ja- digo esas palaras separadas, exclamando que no me hace nada de gracia- y por favor no me lo recuerdes, me pone absolutamente de los nervios, no para de mirarme y me da a mí que este chico es uno de esos que se creen los mejores etc.- le explico a Natalia, mirando el tumulto de gente que sigue habiendo en el fondo de la clase.

-Pues ahora que lo dices, si que parece uno de esos- me da la razón Natalia observándole detenidamente y concentrada.
-¡Sentaos!- exclama mi severo profesor de estudio, todos a la vez que dice esto corremos a sentarnos a nuestro sitio y las chicas contra su voluntad se sientan en sus sitios dejando a Jason durante los próximos cincuenta y cinco minutos respirar. Además, por supuesto ellas se encargan de informar al profesor que hay un alumno nuevo en la clase y por las caras de los chicos deduzco que no les hace ninguna gracia que vayan casi todas las chicas de la clase detrás del nuevo.

Me olvido de todo a mi alrededor y saco de mi mochila el libro que antes inútilmente y gracias a Jason no pude leer, a ver si consigo esta vez leer una página aunque sea, pero no, porque cuando dirijo la mirada a mi nuevo compañero veo que también me mira, con su mirada esmeralda, profunda y curiosa, es increíble… ¡Qué pesado es con las miraditas, parece que sabe que me pone de los nervios! ¿Por qué tendrá que ser tan odioso?

Riiiiiing.

Acaba por fin la segunda clase del día, desde que Jason me ha mirado de tal forma al principio de la clase y yo apartar la mirada fríamente se habrá dado cuenta de que no me importa y ya no me dirige la palabra como en la primera hora.

Voy como antes a la mesa de Natalia pero algo me impide que llegue, mejor dicho alguien, Jason se interpone entre la mesa de Natalia y yo.

-¿Me dejas seguir?- le pregunto con un tono que no le gusta ni a él ni a mí, ya que yo, como he dicho antes, no soy tan grosera. Señalo la mesa de Natalia molesta, voy a apartarle cuando de repente me da un intenso dolor de cabeza, pero no lo digo exagerando, el dolor de cabeza más fuerte que he tenido en mi vida, me mareo, mi visión se limita a solo manchas negras y casi caigo al suelo pero al segundo ya me coge Jason de los brazos.

-¿Estás bien?- me pregunta con repentina preocupación.

-Sí- afirmo, poniendo una mano en mi cabeza, parpadeo repetidamente y se me pasa, afortunadamente, la verdad es que últimamente me pasa esto tan extraño y me atormenta… después de lo del tornado empezó- estoy bien- me deshago de su brazo lentamente y me voy a la mesa de Natalia.

Cuando entra rápidamente mi profesor de ciencias todos se sientan en sus respectivos asientos pero yo me descuido y no me entero hasta que Natalia señala con un dedo disimuladamente a la mesa del profesor y voy a sentarme a mi sitio rápidamente pero el profesor habla.

-Naya, ya que estás de pie, por favor tráeme una tiza- me pide secamente, yo me limito a asentir y corro a la puerta, salgo de la clase, cierro la puerta y respiro hondo, al menos me libro durante un minuto de la mirada que me intimida desde esta mañana.

Estoy llegando a mi clase con la tiza cuando de repente no siento las piernas, me hormiguean, se me duermen por segundos y caigo al suelo, provocando un gran golpe sordo, no me he golpeado la cabeza de milagro. Justo caigo en frente de la puerta de la clase de Dafne y al menos estoy esperanzada de llamar a la puerta de su clase, para que por favor me ayuden a levantarme. Antes, asustada pego a mis propias piernas cada vez mucho más fuerte pero nada, me asusto tanto que se me saltan unas pocas lágrimas, me arrastro por el suelo pero no puedo, ahora tengo un dolor intenso en las piernas, pinchazos por cada milímetro de mi piel y sin más remedio grito, grito desesperada, grito tan fuerte que del ruido los pasillos desiertos y silenciosos tiemblan, me encojo de tal manera que parezco un ovillo pero no pasa, el dolor del infierno no pasa. Tal vez prefiero no sentirlas como antes a que tener este dolor incontrolable que tengo ahora. Alguien al segundo de gritar yo abre la puerta, el tutor de Dafne.

Asombrado me mira.

-Pero ¿qué haces? ¿Qué te pasa?- me pregunta mientras me ayuda a levantarme pero me caigo de nuevo al suelo y del dolor no puedo articular una mísera palabra, este dolor nunca lo había tenido, me escuece demasiado la piel de la cintura para abajo, la sangre pasa por mis venas con mucha dificultad o al menos eso es lo que noto y en mi cuerpo abunda la desesperación de que pare ese horroroso dolor, el estómago se me encoge, el corazón late demasiado despacio, mis ojos se entrecierran, noto cansancio y me empiezan a temblar las manos exageradamente.

Grito de nuevo y esta vez la clase de Dafne entera se estremece y se asoman todos por la puerta a ver y algunos gritan mi nombre ya que me conocen y Dafne asustada se abre paso ante toda esta gente.

-¡Naya!- grita ella tapándose la boca con las manos y muy asustada.

-¡No siento nada del cuerpo!- grito con las lágrimas cayendo salvajemente de mis ojos, pasando por mis mejillas y doy golpes de nuevo desesperadamente a mis piernas.

El tutor me coge en brazos y me lleva a mi clase. Llama a la puerta y luego abre mi profesor, que casi se le caen las gafas y abre de par en par sus ojos diminutos tras sus gafas de culo de botella.

-¡Naya!- exclama mi profesor asustado, llevándose las manos a la cabeza, desde el interior de mi clase se oyen muchos murmullos de asombro sobre todo.

Mi profesor coge su silla que es más grande que la de los alumnos y cómoda e indica al profesor de Dafne que me siente ahí, Dafne se encuentra detrás de su profesor, mirándome con espanto. El tutor de Dafne me sienta en la silla de mi profesor, enfrente de todos los alumnos de mi clase, aunque lo esté pasando realmente mal lo que ronda fuertemente en mi cabeza es el pensamiento “qué vergüenza”.







¿Te ha gustado? Espero que sí y ahora estoy escribiendo el capítulo nueve, a ver que tal.

--->Cambiando de tema, acabé de leer ayer mismo el libro ¿sabes que te quiero? y sinceramente, me gusta la forma en la que escribe Blue Jeans ya que los capítulos acaban de la mejor manera y así el lector desea leer el siguente a la de ya, aunque me ha parecido un tanto extraño el final, intrigante... ¡voy a por Cállame con un beso a la de ya :)












Gracias por leer.

domingo, 27 de noviembre de 2011

Capítulo 7 + Información

Hola a todos, sé que llevo bastante tiempo sin pasarme por aquí pero como mencioné en el facebook y quién haya clicado en mi gusta lo sabrá pero de todas formas lo digo por aquí, tengo exámenes y trabajos que entragar por eso he dejado un poquito esto pero de todas cuando pueda pondré un capitulito e información para los interesados :)

Aquí os dejo con el capítulo 7:







Capítulo 7
El chico nuevo.





Nunca he sido tan tonta como lo he sido ahora, anoche se me olvidó poner la alarma en el teléfono para despertarme y prepararme para ir al instituto, por eso ahora mismo me encuentro corriendo por la calle para llegar bien a la casa da Dafne.

Su madre siempre nos lleva en coche al instituto, al principio iba a ir yo andando siempre pero Dafne insistió en que durante los cursos iba a ir con ella en coche y yo sinceramente me daba igual, aunque lo agradezco.

Son las ocho y veinte, a las ocho y media tengo que estar entrando en la clase, me parece que hoy lunes vamos a llegar justas de tiempo.

Justo cuando llamo al timbre de la casa de mi amiga y alguien abre la puerta al segundo, corriendo Dafne y yo entramos en el coche y su madre sale, entra en el coche y nos vamos.

Menos mal que hemos llegado justo cuando suena el timbre. Entramos al instituto por la puerta principal que primero hay que pasar por el patio para llegar a la puerta del edificio. Pasamos por un porche y entramos, llegamos hasta las escaleras, ya que vamos a clases diferentes tenemos que ir a lugares distintos, ella tiene que ir al piso superior y yo tengo que ir a una de las clases de abajo, me despido de mi amiga que me mira con una cara de: ¿qué hiciste ayer por la tarde?

Corro al aula que tengo que ir pero desgraciadamente veo un cartel de papel en el que pone:


La clase de 4º ESO C de lengua y literatura será hoy en su aula.
Jefatura.



Sí, hoy tocaba dar lengua en el aula de informática, y también me va a tocar salir corriendo y subir al piso superior, sé que voy a llegar tarde pero ya me da igual lo que me pase ¿qué hay peor?

Que llego, que llego.

Toc, toc, toc.

Abro la puerta rápido y al ver que no está la profesora y todos están hablando cada uno con su grupo me sonrojo ligeramente, he quedado como una tonta pero menos mal que nadie se ha percatado de que he hecho eso y que he llegado, pero me da igual.

-¿Eh?- digo yo un tanto confusa, entro en clase y me voy a mi mesa, al final del todo de la clase, en la esquina y al lado de la ventana, un buen sitio.

-Hola Naya- me saluda Natalia, una compañera de clase que va con quien quiere y cuando quiere, a veces va con nosotras, Dafne y yo y otras con otros amigos que tiene. Es una chica verdaderamente alta, tienen el pelo totalmente liso y corto, con flequillo un tanto desigual, no sé si decir que lo tiene recto o hacia un lado, un tanto extraño pero a la vez original, es una chica verdaderamente graciosa y se siente delante de mí- hoy hay una buena noticia desde primera hora, no ha venido el profesor de lengua, asique no tenemos clase, pero desgraciadamente la jefa de estudios ha dicho que venía aquí ahora y se va a quedar con nosotros, ¡no!- que cambios de humor tan propios de… Natalia.
Ya desde por la mañana no me apetece hablar, más que nada afirmo porque agota oír hablar y hablar a Natalia, cuando habla, habla de verdad.

Casi no ha empezado la mañana y ya estoy cansada. Me deslizo entre las mesas, mi clase es un verdadero laberinto y me siento en mi sitio, dejando mi mochila negra y rosa en el respaldo de la silla. Cuando terminamos de hablar Natalia y yo la jefa de estudios entra en clase nadie me vuelve a dirigir la palabra, digamos que no tengo mucho amigos- más vale pocos amigos y buenos que muchos y malos- aparte de que no soy, como digo yo, una tonta-popular.

Todos hacen el tonto como siempre hasta que la jefa de estudios les llama la atención, a mí no me dice nada porque ya estoy sentada en mi sitio.

-¡Sentaos ahora mismo!- exclama , para que todos la hagamos caso y la oiga toda la clase- no ha venido vuestro profesor de lengua y literatura asique, me quedo con vosotros y aprovecho a presentaros a un alumno nuevo, Jason- nos informa la jefa de estudios, que hace un gesto hacia fuera del aula, supongo que para que pase el alumno nuevo, otro más en la clase, lo que faltaba- espero que os portéis bien con él- ésta deja pasar al alumno nuevo…¿¡qué!? ¡Es el chico del parque! Lo reconozco por la cara y me extraña que no se me salgan los ojos de las órbitas por la sorpresa Pero, si parece de Bachillerato y todo.- Está repitiendo este curso, espero que seáis respetuosos con él, mira- dice dirigiéndose al chico- siéntate allí- y sí, está señalando el único asiento libre de la clase, a mi lado- pregúntale a esa chica el horario de la clase y esas cosas, te dejo ponerte con ella para que te explique todo- gracias buena señor, pienso para mis adentros.

La jefa de estudios se sienta en la mesa del profesor, se cruza de piernas y nos vigila. Jason se sienta en su sitio y junta su mesa con la mía. Disimuladamente veo que Natalia está riéndose seguramente de mí porque desgraciadamente me toca al nuevo explicarle todo, siempre estoy suele ser un rollo.

Que mala es conmigo aunque al verla la cara me río por dentro, porque me pone unas caras de burla tan ridículas que no puedo aguantar la risa.





Es cortito pero el siguiente... buuf jajajaja
Bueno y la información aquí:

-Me he quedado sin ideas de encuestas asique ya quito la encuesta que puse hace tiempo y se acabó el tiempo para votar que os lo dije en la entrada anterior que publiqué.

-Sí, al final vi el viernes la película de Amanecer Parte I y... no hay palabras para describir, cuando pasa todo lo que pasa n la película me sentía incluso triste, dolida y estupefacta por todos los acontecimientos y asombrada por la boda y el sueño que tiene al principio es... siniestro... leí el libro y la película que iba a pensar que iba a ser más de lo mismo, increíble pero está mucho mejor de lo que pensaba, aunqu7e es un poco sangrienta y angustiosa me encanta y ¡¡la recomiendo!! (a quien no la haya visto)

-Ya no voy a afiliar en mi blog a nadie más porque ya no quiero poner más cosas en el blog y estoy por quitar todos los premios que me han dado ya que ocupa mucho espacio, aún así publicaré todos los premios que me deis, gracias :)
Es que lo veo un tqanto saturado.



Y nada más, buenas noches y ánimo ya que mañana es lunes jajajaja













Gracias por leer.

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Información.

Hola, bueno sé que no es lunes pero da igual, aquí información.

Hoy os voy a decir que gracias por partipar en la encuesta que puse hace un tiempo:

¿Te gusta mi libro?
-Sí, me encanta---------> 34 votos... 94%
-Más o menos-----------> 2 votos... 5%
-No, no me gusta-----------------> 0 votos... 0%


Además, el viernes me voy a ver Amanecer Parte 1... por fin la espera ha terminado :) El sábado supongo que pondré una entrada con una comentario sobre la película aunque de todas formas creo que la película va a ser genial :)













Gracias por leer.

domingo, 13 de noviembre de 2011

Capítulo 6

Hola gente, como muchas me dijisteis que si por favor ponía los capítulos más seguidos pues lo he hecho, aquí tenéis el capítulo 6, que lo disfrutéis.







En el parque.





Cuando abro la puerta cuidadosamente de mi casa me percato de que todo está en absoluto silencio. Supongo que mi madre habrá llegado a casa y estará haciendo la comida ya que es  la hora. Cierro la puerta y ando hasta el salón, me asomo a la ventana y veo a mi padre jugar con mi hermano en el gran jardín que tenemos al baloncesto ya que mi padre hace unos días compró una canasta de baloncesto…
Dejo las llaves en una pequeña cesta de color negro que es donde dejamos las llaves de la casa, cada uno las suyas y me dirijo a la cocina. Abro la puerta y me encuentro a mi madre sirviendo la comida, toca de comer hoy una rica paella, típica comida de domingo.
-Hola hija ¿qué habéis hecho Dafne y tu ahora? ¿Habéis ida a sacar un rato a Flufi?- parece ser que no le voy a poder decir la verdad, ya que es mi deber, no lo puede saber nadie.
-Nada, que sí, hemos dado una pequeña vuelta- me limito a decirle.
-Vale, venga que tenemos que comer que acabo de hacer la comida… ¡Sam, José!- llama mi madre a mi hermano y mi padre para que también vengan a comer con nosotras y dejen de jugar en el jardín. Pasa un buen rato pero no vienen.
-Mamá, ¿voy a buscar a los pesados?- le pregunto con una sonrisa, ya que mi jardín es muy grande y tiene una bajada a un descampado que lo rodea árboles pues hay mucho espacio en el que buscar.
Salgo por la puerta de cristal que conecta la cocina al jardín y corro por la bajada, gritando a mi padre y mi hermano por si me oyen y oigo algo.
-¡Ya vamos!- oigo decir a mi padre.
Voy a darme la vuelta cuando veo una ardilla sentada en suelo observándome.
-¿Qué pasa con vosotros?- le pregunto a la ardilla sin esperar respuesta, no entiendo como es que se comportan hoy tan raro los animales que he visto hoy.
-Nada, que estábamos jugando, vamos Sam que hay que comer- me responde mi padre, se habrá pensado que me refería a ellos.
Dejo atrás a la ardilla tan extraña y entro en mi casa para comer.
Termino de comer, mi madre se queda en el salón viendo la televisión con mi hermano y mi padre se va ha echar una pequeña siesta, como siempre que está aquí, ya que él trabaja en un trabajo que siempre tiene que viajar y de casualidad esta semana va a estar con nosotros pero luego vuelve a irse, el miércoles justamente se le acaban las pequeñas vacaciones. Mi madre trabaja en un colegio como profesora y trabaja por supuesto, de lunes a viernes. Me quedo un buen rato con mi madre y mi hermano viendo la televisión hasta que me voy al jardín y le mando un mensaje a Dafne.

Dafne, si mis padres por cualquier cosa da la casualidad que te llaman a tu móvil o a tu casa diles que nosotras estamos juntas haciendo algo del instituto, ¿vale?

Mientras espero la respuesta vuelvo al salón, ya que hace fresco al entrar me golpea una ola de calor porque la chimenea del salón está encendida, aunque sea marzo hace un poco más de frío de lo normal.
-Mamá ¿puedo ir a casa de Dafne a pedirle una cosa del instituto para que me lo deje? Tal vez tarde un rato- le explico, por supuesto es mentira.
-Si es del instituto de acuerdo pero como mucho a las seis te quiero ver aquí, son las cinco- me informa- porque hija, es domingo y sabes que no me gusta que salgas un domingo, pero si es por el instituto…-
Me pongo el abrigo y salgo a la calle, en ese preciso momento suena mi teléfono, alguien me ha enviado un mensaje.

Vale Naya, pero ¿por qué?

No la contesto a mi mejor amiga, sé que si lo hago al final me va a sacar toda la verdad y no me apetece contarle que quiero aunque sea estar un rato sola y reflexionar pero de todas formas no hay ningún problema.
Doy un paseo tranquilamente, como si el tiempo se parase ante mi petición de estar un rato sola y yo fuera la única que no se para, las calles están desiertas, vacías, solo se oye la brisa que hace mover las hojas de los árboles
Voy al parque donde me ha ocurrido todo lo de esta mañana, está a la otra punta del pueblo pero no me importa, quiero inspeccionarlo. Este extraño parque se divide en dos partes, una donde hay plantas, bancos para sentarse, etc. En la otra están columpios y un tobogán para que se diviertan los niños. Sigo andando hasta la parte donde hay bancos y me siento en uno, está todo vacío menos que en un banco hay un hombre de negro, no puedo distinguir si es hombre o mujer, si es mayor o menor ya que está totalmente tapado de negro, con una gabardina y un sombrero que le tapa la cara.
Me levanto y me alejo, me apoyo en una barandilla de un pequeño puente que permite pasar por encima de un arroyo ahora inexistente y hay una pequeña placa en la parte de los bancos en la que pone:

Parque de la Esperanza. Un lugar donde tus sueños y pesadillas se pueden hacer realidad.

Me da un gran escalofrío que recorre todo mi cuerpo en una décima de segundo, de verdad, ese cartel, lo que dice me da muchos escalofríos e inconscientemente me froto un brazo en señal de que tengo frío. Esto es un tanto siniestro.
Sin pensármelo dos veces me doy media vuelta para irme a mi casa, pero antes hecho un último vistazo al extraño que no se mueve ni un solo centímetro. Empiezo a andar cada vez más deprisa. Hasta que llego a mitad de camino no aminoro la velocidad, ahora voy tranquila cuando veo de nuevo al extraño de negro, va… ¿por delante de mí?, no puede ser porque me he ido antes que él del parque, demasiado extraño es todo esto, además que va en dirección contraria hacia donde voy yo. Andamos y cada vez estamos más cerca, entonces es cuando me mira a los ojos y es cuando distingo que es un chico, tal vez de mi misma edad, es un tanto guapo, lo reconozco, al menos por la cara que es lo único que le puedo ver, tiene unos preciosos ojos verdes, de un color verde tan claro que parecen esmeraldas.
Me hechiza con esos extraños ojos, pero me distrae al ver que abre los ojos de par en par, como si hubiera algo detrás de mí que le asusta, giro mi cabeza asustada- no me extrañaría nada que fuera un tornado de nuevo, como esta mañana- cuando giro la cabeza veo que detrás de mí no hay nada pero cuando vuelvo a dirigir la mirada extrañada al chico veo que ha desaparecido, decepcionada me voy a mi casa. Lo que me ha pasado a mí este día no lo puedo explicar, ojalá no tenga un día como este en toda mi vida o peor, aunque no creo que me pase otro día algo mucho peor que todo esto.
Necesito relajarme, por eso, cuando llego a mi casa sin decir nada de que he llegado me subo al piso superior y me ducho, una ducha de agua caliente para ver si por fin en este día me relajo un poco y me olvido de todo cuando cae el agua caliente por mi cabeza y me moja el pelo castaño oscuro y largo, después me voy a cenar y me voy a la cama, estoy agotada y después de todo , todo lo que me ha pasado, digo yo que me merezco un descanso ¿no?
Voy a ser positiva, que lo necesito. Mañana será un día normal de instituto… un patético lunes, comienzo de la semana en el instituto, definitivamente los lunes los odio con toda mi alma. Parece ser que es imposible ser positiva ahora. Lo bueno es que ya queda menos por saber qué poderes tendremos Dafne y yo porque lo que ha dicho esta mañana Ione que lo sabremos seguramente esta semana, aunque tengo que pensar que puedo hacer durante esta semana, a partir del miércoles que nos dijo Ione que faltáramos a clase… ¡Ah! Tengo suerte porque mi padre se va justamente ese día y mi madre trabaja, no tienen por qué enterarse. Sabremos en qué nos transformaremos, pero hay una pregunta que me ronda la cabeza desde esta mañana que nos leyó Ione la leyenda esa rara, ¿quién es esa cuarta persona de nosotras que tenemos poderes?
Espero que no suframos mucho, de todas formas Ione nos ha afirmado que Dafne y yo sufriremos bastante, lo que me faltaba. Espero que se equivoque, por favor.







Bueno me parece a mí que me ha salido de largo más o menos que el quinto ¿no? Espero que os guste :)  Gracias por comentar. Hablaremos ya cuando vuelva a publicar otra entrada y espero que disfrutéis de lo poco que queda del fin de semana... solo esta tarde domingo.












Gracias por leer.

jueves, 10 de noviembre de 2011

Información + algo más.

Sencillamente increíble, hola a todos, ¿sabéis por qué digo " sencillamente increíble"? Porque me han dado un montón de premios, miro hoy mi blog y veo que han publicado comentarios en los que dicen... ¡tengo un premio para ti en  mi blog!... de verdad que muchísimas gracias, sois de lo mejor!! :)


Este me lo ha dado Mari ♥ :



Y aquí una preguntitas:


1) Estas contenta con el resultado de tus visitas? Sí y mucho porque pensaba que sobre estas fechas no iba a estar con tantos seguidores (aunque sean pocos para mi son bastantes y estoy satisfecha, además porgo lo que yo quiero y si hay gente que se hace seguidor pues le doy las gracias de todo corazos) :)

2) Cambiarías algo de tu nove? Claramente no porque no es que sea una creída que creo que soy perfecta, yo pienso que mi libro está bastante bien, a quien le guste bien y a quien no pues que no lo lea.

3) Este premio que significa para ti? Mucho poque significa que te gusta mi blog y para mi cualquier premio y comentario, visita etc me parece importante...


1.    Signo del zodiaco: cancer

3.    Un deporte: badminton

4.    Profesión: anquitectura, pintor y escritor :P

5.    Idiomas: Español, inglés y me gustaría aprender italiano

6.    Época en la que te gustaría vivir: yo estoy muy bien en la mía

7.    Un dibujo animado: bob esponja por hacerme reir, que se repite como el ajo pero me ria por su idiotez jajaja

8.    ¿Tienes algún piercing o tatuaje? Noo... :)

9.    Un postre: yo algo con chocolate

10. Alguien a quien admiras: ahora mismo... no se

12. Tu MSN: quien quiera tener contacto conmigo le daré uno del blog

13. Lo más lindo de la vida: mi conejito :P

14. Lo mas valioso: no se... :S

15. Un defecto propio: soy desordenada

16. Una virtud propia: estudiosa y por lo que se buena amiga :)

17. Un buen recuerdo:  ahora mismo muuuuchos

18. Que te hace llorar: ver una pelicula triste

19. Que te hace reír: muchas cosas

20. Un miedo: que el blog y mi página de facebook se vayan a pique xD

21. Una frustración: esperar a que salga una pelicula al cine o un libro a la vente... frustrante -.-"

22. Tu primer amor fue: ningunoooooo




Este premio me lo han otorgado unas chicas geniales, que escriben muy bien :) Carla & Beler :





Y por último una chica genial que bueno últimamente no pasa mucho por su blog pero tiene sus motivos... muchas gracias M.C.G ... Estos premios son maravillosos, especiales, bonitos y divertidos :D



















Gracias, sois geniales... estoy maquinando yo también algo con premio para dentro de un tiempecitoo :) algun que otro premio especial hehco por mi :)
De verdad que gracias.



Además, a parte de eso tengo que decir que esta vez voy a tardar tnato en publicar un capítulo nuevo, este finde tenéis mi sexto capítulo del libro :)
¡Un gran saludo!














Gracias por leer.

lunes, 7 de noviembre de 2011

Capítulo 5

¡Hola! Lo sé, lo sé, no me pegueis, que sé que queréis ya leer el quinto capítulo pero como no tengo tiempo... jaja, es broma, por fin os pongo en esta entrada el quinto capítulo. Es bien largo, por lo menos después de tanta espera os voy a hacer leer un poco- ese poco es irónicamente jeje- que disfrutéis del nuevo capítulo :)








La leyenda.





-Uno solo- repito yo, en señal de que lo siento mucho, no la creo.
Ione y yo nos fulminamos cruzando nuestras miradas y Dafne confusa mira a una y luego a otra, avanza, se pone en medio de nuestras miradas y así bloquear esta situación violenta, desagradable e incómoda.
-Chicas, por favor- comenta decepcionada mi mejor amiga- Ione, la verdad es que tu historia a mí cuando me la contaste me costó muchísimo creerte y lo sabes- ahora Dafne se dirige a mí- y tú, Naya, hazla caso que dice la verdad, no sé qué quiere decir pero todo lo que te diga Ione es cierto, lo digo por experiencia-
-¿Qué? Pero si lo que me ha dicho no tiene sentido- replico yo cruzándome a la vez de brazos.
-Dafne, déjalo, cuando le pase algo que no pueda explicar será lista y vendrá con nosotras, las que decimos la verdad- resalta Ione- ahora vengo, os voy a traer algo que tú, Dafne, tampoco sabes aún- se da media vuelta, sale del salón rápido y corre a la cocina, se oye como abre y cierra cajones y rebusca en armarios.
-Dafne- la llamo aprovechando que ahora no se encuentra con nosotras Ione- ¿de verdad la crees?- le pregunto.
-Completamente- abro de par en par los ojos, asombrada de la inocencia de mi amiga.
A mí, reconozco, que me encanta la fantasía pero en el fondo sé que es mentira, aunque pensándolo bien la tengo que creer a la fuerza por lo que he vivido hace una hora, lo del tornado. El pensamiento que ahora me rodea es el miedo, me da un escalofrío al pensar en el tornado y me entran unas terribles náuseas. Me siento en el sofá color blanco, rodeando con mis brazos mi estómago y balanceándome suavemente, hacia delante, hacia atrás, hacia delante, hacia atrás, rezando porque se me pase el mal estar que tengo ahora. Dafne, en cambio se queda de pie, mirando el paisaje por la ventana, sumida en sus pensamientos, apoyando su barbilla en una de sus manos.
-¡Aquí está!- se le oye exclamar desde la cocina al salón a Ione, feliz viene y se apoya en el marco de madera oscura de la puerta del salón, enseñando orgullosa un documento amarillo, viejo e impresentable. Se dirige a la mesa grande del salón y se sienta, hace un ademán para que también nos sentemos nosotras y reunirnos para hablar.
Dafne se sienta rígida en el sofá blanco, al otro extremo de la parte del  sofá donde me encuentro yo, apoyando mi cabeza en mi mano. Yo cruzo las piernas e Ione coge una silla, la pone de manera que queda frente al sofá, se sienta despacio, observándonos y aferrando contra su pecho la carpeta tan vieja. Ione por fin baja la vista, parece distante y alerta, es ridículo.
-Ione, dinos de una vez que es eso por dios, que me aburro- digo enarcando una ceja, que ridículo innecesario estamos haciendo, tanto misterio tonto…
-Calla, que impertinente te has vuelto en un abrir y cerrar de ojos- me reprende Dafne, la que confía plenamente en nuestra amiga Ione.
Es increíble como en cinco minutos mi situación de amistad con ellas ha cambiado radicalmente, ahora me parece que están locas, raras, paranoicas y que deben ir al médico o algo así, me duele pensarlo, pero es así. Hay una voz en mi interior que me dice que tienen razón, otra que cuando tuve ocasión debería de haberme ido a vivir a Valencia con mi hermana mayor, otra que tengo que salir corriendo de allí y otra que las escuche y luego saque mis propias conclusiones. Este último pensamiento es al que hago únicamente caso.
Ahora Ione no me hace algún caso, coge su carpeta, la da media vuelta y nos la muestra, al principio no me percato y me encojo de hombros hasta que Dafne intenta forzar un poco su vista y me fijo de que hay algo escrito en negro con letra muy pequeña, yo también intento leer las letras pero como son tan que casi no se ven.
-¿Qué pone?- pregunta Dafne confusa.
-Es el título del “trabajo que hice hace mucho tiempo y os va a interesar- explica con una media sonrisa Ione- Pone “La leyenda de los cuatro elementos”- al decirnos tal título a mí se me unen las cejas de una manera extraordinaria y Dafne pone una mueca muy extraña y sus labios adoptan una forma de: ¿Qué?- Os habéis quedado con cara de póker, ¿he dicho algo raro?- ríe.
-Pues claro que es raro lo que has dicho… ¿una leyenda?- dice Dafne ya empezando ligeramente a dudar de nuestra amiga que es más mayor que nosotras.
-¿A qué viene lo de la leyenda?- me quejo yo, confusa, tal vez mucha más que Dafne.
-¡Dejadme terminar!- grita Ione bastante enfadada, nunca la he visto enfadada y de esta manera.
Después de estar unos pocos segundos en silencio e Ione observa que por fin dejamos de quejarnos y le prestamos atención abre la carpeta y deja que veamos el contenido, hay pocas hojas pero Ione decide coger la última de todas, todos los folios están repletos de letras pero al ver ella que Dafne y yo queremos leerlas ya cierra la carpeta de golpe y empieza a leer la hoja que ha cogido.
-La leyenda de los cuatro elementos. Se sabe qué chicas y qué chico están encargados de esta misión tan importante, cada poder que tendrá cada uno y al bando que pertenecerán o pertenecen.
      -Quien sea de cualquier bando y haya sido vencido y viva recibirá un solo aviso, un aviso bastante peculiar, un tornado directamente se lo tragará. Así ese elegido sabrá quién o mejor dicho qué es. Porque no recordará nada hasta la adolescencia que es cuando empezará a sufrir cambios.
       - Tres de “ellos” tendrán la misma edad menos una.
       - Tienen terminantemente prohibido delatarse, decir a algún humano que son como son, especiales, porque sí no, el que le haya elegido le aportará un durísimo y doloroso castigo.
        - No tienen permitido, además, tener relaciones amistosas, buenas o amorosas entre personas de diferentes bandos, cada uno con su bando, sino también por eso serán severamente castigados.

-Bueno, ¿qué os parece?- nos pregunta Ione encogiéndose de hombros, como si en vez de haber leído una leyenda que no sé si es cierta y es demasiado rara para mí hubiera leído un cuento que por ejemplo habría escrito ella y esperara nuestra crítica.
-Qué triste, todo es sufrimiento y órdenes- me sorprendo al decir solamente eso, debería de haber gritado algo como… ¡esto es una tremenda locura, estás loca! E irme por la puerta, olvidarme de todo lo que ha pasado en el día y comportarme como si nunca hubiera pasado nada.
-Todo esto no lo entiendo… no sé si creer a nadie- dice Dafne que ya empieza a comportarse debidamente, no como una loca de la fantasía y cuentos de hadas o historias de miedo. Parece como si estuviéramos escribiendo una historia de miedo futura, solo que para Dafne y yo porque Ione parece la misma de siempre.
-Pero una de las cosas que más me ha llamado la atención de la leyenda que has leído tan rara es que ha mencionado a un chico a parte de nosotras- digo sorprendida y con la vista fija en ningún punto en concreto, pensando que hay más gente como nosotras por ahí fuera, intentando asimilar que habrá por ahí gente tan rara o más que nosotras.
-¡Te has fijado! Sí, parece ser que hay un chico por ahí fuera que espera encontrarnos, pero no sé por qué, tampoco sé dónde está, ni como es, ni que haremos cuando nos encontremos, pero lo que se por lo menos es qué soy yo, pero no sé de dónde vengo- en realidad Ione si que sabe de dónde viene, tal vez se hace una ligera idea y no quiere que lo sepan Naya ni Dafne. Ione sabe muchas cosas más que no menciona.
-Pero esta leyenda va sobre nosotras, sobre las normas que hay pero no nos dice nada de por qué somos así, hemos sido elegidas para algo… ¿para qué?- en eso mismo estaba pensando yo, ¿para qué?
-Lo siento, eso sí que no lo sé- le responde Ione con cara de decepción y encogiéndose de hombros.
-¿Dice algo de bandos pero en realidad que somos? ¿Seremos brujas, algo así o… tendremos poderes?- pienso en voz alta sin esperar alguna respuesta pero mis amigas hablan.
-¡Como mola!- exclama alegre mi mejor amiga que de repente le ha pasado algo como para sonreír y decir eso, siempre de pequeña he soñado con eso porque me parecía muy divertido, pero ahora una única pregunta me formulo, ¿de verdad tener poderes será tan divertido como pensaba yo de pequeña?- ¿Qué haremos? ¿Qué poderes tendremos cada una?- pregunta Dafne muy rápido, sin dejar hablar a nadie y demasiado entusiasmada.
No sé cómo es que se siente así de bien Dafne, si hoy- por lo menos para mí- está siendo un día agotador y diferente, en otro momento me habría parecido algo estupendo, aventurero, increíble y muy, muy divertido pero ahora solo me apetece acabar con esta infernal conversación e irme a mi casa para descansar toda la tarde que me queda después de comer. Ahora que me acuerdo miro mi reloj detenidamente y veo que todavía son la una en punto, a la una y media recuerdo que me tengo que ir a casa a comer.
-Escuchad chicas, pero la leyenda no acaba ahí, me acuerdo que la imprimí hace mucho tiempo y está que da pena por como lo he guardado, muchas cosas son ilegibles pero ahora veo un pequeño párrafo que se puede leer bien a medias:
           …dos de las tres chicas lo pasaran muy mal porque se transformaran en algo que creen que no existe pero ellas van a ser eso que creen que es imposible…>

De repente aparece en el salón el pequeño perro de Ione, un Yorkshire, se acerca a Dafne y ésta le acaricia, se llama Yoshy- personalmente este nombre no me gusta para un perro, a lo único que me recuerda es al dinosaurio de Mario Bros- pero bueno, para gustos colores ¿no?
-Además, una cosa más, no vais a poder salir durante unos días de casa, mañana lunes podréis ir al instituto, el martes tal vez, pero el miércoles lo tenéis totalmente prohibido porque es peligroso para vosotras y la gente que os rodea- nos informa Ione.
-¿Pero cómo lo haremos si no nos dejan nuestros padres?- me quita de la boca Dafne esta frase- el resto de esta semana tenemos Naya y yo clase- se encoge de hombros.
-Ya lo sé, pero me tenéis a mí que soy vuestra amiga adulta para ir a recogeros cuando os pase algo, me llamáis desde el instituto y ya está, asunto arreglado, que sé que no os dejan salir del instituto a menos que no vaya un adulto- dice Ione encogiéndose de hombros.
-Es verdad- afirmo yo.
-Y recordad que no se lo podéis decir a nadie que hacéis ni que sois - nos avisa.
-Sí- decimos Dafne y yo a la vez. Las tres no empezamos a reír por esa tontería pero por lo menos nos reímos desde que a mí me ha pasado eso y de tanta tensión que ha habido hace un rato aquí, entre nosotras. Cuando acabamos de reírnos nos quedamos en silencio.
-Bueno, ¿nos puedes decir a mí y a Naya en que nos transformaremos y qué poderes tendremos?- le pregunta Dafne a Ione sonriendo y poniendo cara de niña buena, inocente y como si nunca hubiera roto un plato.
-¡Que no lo sé pesadita!- dice Ione con la voz un tanto alta y medio riéndose
-¡Jo!-se queja Dafne, pero a la vez sonriendo.





Este capítulo va sin foto porque no he encontrado ninguna que tengo adecuanda para lo que sucede pero bueno, a la próxima si que sí. Espero que hayáis pasado un buen lunes. Nos vemos loa próxima vez que publique entrada :)  Seguramente la próxima entrada que ponga en este blog será mi famosa reseña: Información.











Gracias por leer.